Auschwitz (2011)

Hace un año estuve una semana pasando frío por Polonia. Mi primera recomendación: no vayáis en los primeros meses del año o moriréis de frío; aunque si queréis experimentar el auténtico frío polaco, supongo que febrero o marzo es una buena época :)

Nuestro destino principal fue Cracovia, ya que Varsovia nos pillaba un poco lejos y así de paso, podíamos visitar Auschwitz, que está más o menos cerca. Esta entrada es un resumen de este artículo que escribí en su día para otro blog. Allí podréis encontrar una crónica más completa de lo que vi allí.

Para llegar contratamos un servicio que tiene la oficina de turismo de Cracovia. Por 90 zlotys (unos 25€), un microbus nos fue a recoger al albergue a hora temprana (sobre las 08:15). Es mejor ir a primera hora, porque hay menos gente, menos grupos y así puedes aprovechar las pocas horas de luz que hay en este país (en invierno anochece a las cuatro de la tarde).

La entrada al campo es gratis, pero si realmente quieres enterarte de algo y conocer los detalles recomiendo coger una guía (no sé cuánto cuesta, porque venía incluida en el precio). Esta guía nos fue explicando durante casi las cinco horas que dura la visita todo con gran detalle y tranquilidad. Además, era una guía para nosotros solos y no nos incluyeron dentro de otro grupo de españoles, a parte de hablar muy bien el español.

El recorrido consta de dos partes; en primer lugar está el campo de concentración conocido como Auschwitz I y el segundo lugar, el campo de exterminio Auschwitz - Birkenau. Después de las dos horas que dura la visita al primer campo, el autobús os recogerá tras un descanso de 15 minutos y os llevará al segundo campo.

Lo mejor: el servicio gratuito y no lucrativo. La organización del museo y el respeto con el que se ha tratado todo allí dentro.

Lo peor: no tengo ninguna queja, pero la sensación con la que sales de allí no es nada agradable. Así que, antes de entrar, prepárate para una mañana llena de emociones fuertes.