La Acrópolis de noche |
El año 2010 fue una locura en cuanto a viajes. Después de el InterRail por los Bélgica, Holanda y París, tuve la oportunidad de hacer una pequeña escapada con gastos pagados a Atenas :P Estuve un fin de semana a mediados de Abril y aunque vi bastantes cosas, os voy a contar en concreto mi visita a la Acrópolis.
Si os alojáis en un hotel u hostal de la ciudad o del centro, la llegada es muy simple: coged el metro. El metro de Atenas está muy bien cuidado y es bastante nuevo, además, en algunas estaciones se han encontrado restos arqueológicos y las han convertido en pequeños museos para todos. En una de las estaciones vais a poder admirar cómo eran los sistemas de desagüe, con los canales de ladrillo muy bien conservados; en otra, están expuestos las réplicas de las esculturas del frontón del Partenón (los originales están en el museo británico). En cualquier caso, el metro os lleva a las puertas de la Acrópolis, sólo tenéis que bajaros en la parada "Akropoli" que pertenece a la línea 2 (roja). De hecho, Atenas sólo tiene tres líneas de metro así que no es muy complicado viajar. El viaje en metro cuesta 1€ (al menos cuando yo estuve, ahora no lo sé) pero no está muy controlado.
La entrada a la Acrópolis es gratis para estudiantes de la Unión Europea, la normal son 12€. Lo bueno de esta entrada, es que una vez que la has comprado tienes acceso a la Acrópolis, pero también al Ágora, el Teatro de Dionisos, el Ágora romana, el templo de Zeus y la biblioteca de Adriano. Así que al final te sale rentable porque puedes visitar todos los puntos históricos de la ciudad con una sola entrada. En esta entrada no se incuye la entrada al museo nacional (la entrada reducida son 3€ y la normal 7€).
Tengo que decir que allí tampoco controlan mucho si tienes la entrada o no, lo tienen un poco abandonado y a veces pasan bastante, pero merece la pena visitarlo una vez en la vida.
PUNTOS FUERTES
Teatro de Dioniso |
Como ya sabéis la Acrópolis se encuentra en el alto de una colina, pero para llegar hasta allí hay un buen trecho. Mientras se va ascendiendo se pueden admirar otras joyas de la antigüedad griega, como el Teatro de Dioniso o el Odeón de Herodes Ático. El Teatro de Dioniso (construido en el siglo IV a.C) está adecuado al terreno, por lo que las gradas forman parte de la pendiente del monte donde está ubicada la Acrópolis; aun se conservan muchos de los asientos de mármol y los mosaicos de la orquesta. En cuanto al Odeón, fue construido por Herodes Ático, un rico político griego que estaba al servicio del Imperio Romano. Gracias a su fortuna, en su mano estuvo el mecenazgo de algunos de los edificios importantes de Atenas, como es el caso del Odeón. Está en muy buenas condiciones y actualmente se sigue utilizando para representaciones teatrales o conciertos gracias a su buena acústica. Aunque ahora tiene la misma concepción que un teatro romano, hay que imaginárselo cubierto.
Odeón de Herodes Ático |
Después de un rato ascendiendo por el camino de piedras, os váis a encontrar con la entrada a la Acrópolis, llamada también Propileos cuya restauración terminó en el 2005, por lo que ya no lo vais a encontrar con andamios. Tras ascender por las escaleras flanqueadas por sendas columnas entraréis por fin a la Acrópolis y frente a vosotros, el Partenón. A la izquierda el Erecteión y a la derecha, el pequeño templo de Atenea Niké, que no tuve oportunidad de ver porque estaba en proceso de restauración.
Partenón |
El Partenón ya no tiene andamios, porque hace poco que se terminó su restauración, así que tendréis mejor suerte que yo :P. Aun así, no le quita nada de valor a pesar de quedar poco del original. Su construcción está ligada a la victoria de los griegos frente a los persas y en agradecimiento a los dioses. Durante siglos su función religiosa pervivió hasta el siglo XVI cuando fue destruido por los turcos y lo usaron como polvorín. Y como supongo que ya sabréis muchos de los conjuntos escultóricos están hoy expuestos en el Museo Británico y en el Museo Histórico Nacional de Atenas. Y después de tantos avatares, el Partenón sigue ahí para nuestro deleite.
Erecteión y Cariátides |
Aunque la mayor atracción para los turistas es el Partenón, mi preferido es el Erecteión y el pórtico de las Cariátides. Se comenzó a construir en el 421 a.C en honor a Erecteo y Posidón. Es un templo poco común pues no tiene una planta regular, así que está dividido en varios niveles del terreno. Para mi una de las partes más bonitas de su arquitectura es el pórtico de las Cariátides, que son columnas con forma de mujer. Disfruté mucho viéndolas en directo, aunque están bien protegidas y alejadas del camino principal para turistas (lo cual me parece muy bien para que no sufran más degradación).
A parte de estos edificios hay otros restos que no tienen el mismo estado de conservación y están en ruinas, por lo que solo se puede observar y a duras penas el trazado que podían tener.
Una vez que hayáis visto todo, no perdáis la oportunidad de hacer una panorámica de la ciudad y del conjunto arqueológico porque es digno de ver. Desde allí, también podréis ver desde arriba los Teatros y el Odeón.
Aprovechando que estáis allí, yo os recomiendo que bajéis desde la Acrópolis hacia el Ágora antigua, donde está la Stoa de Átalo, reconstruida y el Templo de Hefestión que está en muy buen estado de conservación y merece la pena verlo.
Templo de Hefestión |
- Lo mejor: el sitio es un lugar impresionante que hay que ver una vez en la vida, así que para mi lo mejor es eso, el sitio, los monumentos y la historia del lugar.
- Lo peor: el estado de conservación en el que están algunas cosas y más ahora con la crisis, parece que se han descuidado bastante las atenciones a los edificios. No está muy bien adecuado para personas que no tienen mucha idea de historia. Creo que se podría acondicionar mejor.
esta muy bien, yo quiero iiir!!!
ResponderEliminarYa iremoooos!!! Y además ahora no tiene andamios, así que mejor ^^
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